Uno de los ejes de las intervenciones de la última tarde del Forum es el estudiante.

Un representante de la OCDE analiza en primer término la importancia y formas de apoyo financiero que reciben los estudiantes universitarios en diversos países. Las conclusiones de los estudios realizados permiten concluir que:

– existe una gran diversidad de sistemas de apoyo financiero público a los estudiantes universitarios

– cuanto mayores son los fondos públicos destinados a los estudiantes más amplio es el acceso a la educación superior en los diversos países. Esto es cierto incluso en el caso de países con tasas altas. Establecer tasas suficientes y combinarlas con mecanismos de apoyo bien financiados como becas o préstamos parece ser una fórmula eficaz para facilitar el acceso a la educación superior. Aquellos sistemas públicos que combinan de tasas significativas con préstamos y becas suelen ser eficaces en la promoción de la igualdad de acceso a la universidad y, simultaneamente, logran un equilibrio en el reparto de sus costes entre los estudiantes (y sus familias) y el Estado.

– en los paises con sistemas impositivos muy progresivos (Noruega, Suecia, etc) no suelen pagarse tasas y los estudiantes suelen contar además con becas, préstamos etc. que les ayudan a iniciar y proseguir sus estudios sin trabajar

– hay una tendencia creciente en los países de la OCDE a repercutir la mayor parte de los costes de los estudios en el caso de estudiantes extranjeros

– también se observa una tendencia a diferenciar los precios de matrícula según el área de estudios o las necesidades previstas del mercado laboral (caso de Australia)

Comparativamente con otros países, el sistema universitario español se caracteriza por tener relativamente restringido el acceso a la universidad (en los países de la OCDE se estima que, de media, cerca del 60% de población joven pasará en un momento u otro de su vida por la universidad y este porcentaje ha crecido sensiblemente en los últimos quince años, mientras que en España nos encontramos algo por encima del 40% con un nivel de acceso a la universidad estabilizado en las dos últimas décadas),  tener tasas (matriculas) algo más bajas que la media de la OCDE, tener también menos becas públicas que la media y prácticamente ningun préstamo y ninguna beca privada.

Posteriormente, un representante de la European StudentsUnion     presenta un informe con la situación comparativa de los sistemas de matricula y costes de los estudios en Europa.

Finalmente, un representante de la Universidad de Warwick analiza el impacto del nuevo sistema de tasas en Inglaterra que transforma al estudiante en cliente y genera nuevas e importantes consecuencias para las universidades. Tras destacar que hasta hace una veintena de años no existían las tasas en el Reino Unido para sus estudiantes o para los pertenecientes a la UE, señala la evolución existente desde entonces:

1998                 1.000 libras para los estudiantes RU y UE, 3.000 para no UE

2004                3.000  para UE

2012                 9.000 para UE y13.800 a 18.650 para no UE

El nuevo sistema de tasas inglés, que ya hemos comentado en numerosas ocasiones en este blog, no parece responder tal y como sus promotores habian previsto ya que las universidades no han entrado en una competencia de precios como se pretendía. Por eso no ha caido, como esperaba el gobierno, el coste de los estudios universitarios y 2/3 de las universidades se  han asentado en los precios máximos autorizados. Esto supone un mayor coste para estudiantes (y sus familias) y para el Gobierno (que ve aumentar el importe de las becas y de los préstamos -que él efectúa o garantiza – a los estudiantes).

Esto tiene consecuencias importantes: el estudiante es ahora un consumidor de universidad, si bien es cierto que se trata de un consumo “especial” porque además de pagar debe trabajar si quiere sacar provecho de su dinero.

En este nuevo contexto el estudiante es más exigente y pide:

  • Mejor docencia (cantidad y calidad)
  • Mejor servicio: notas en plazos, asistencia regular de profesores…
  • Mejores infraestructuras: bibliotecas, comedores, lugares de reunión. servicios informáticos..
  • Ayuda en materia de salidas profesionales y empleo

Además la universidad asume una lógica de “mercado”:

  • Compite por los buenos estudiantes
  • Compite por los buenos profesores
  • Introduce el marketing
  • Refuerza su oferta complementaria de servicios: residencias, informática…
  • Asume los “rankings”, fundamentales para la reputación; y otros instrumentos impulsados desde el Estado que exigirá a partir del año que viene que las universidades faciliten públicamente en web un amplisimo listado de indicadores (Key Information Set) que informaran al estudiante y futuro estudiante entre otras cosas de los niveles de empleabilidad y remuneraciones de los estudiantes egresados de cada universidad y titulación tras finalizar sus estudios.

Y la Universidad cambia:

Porque el Estado tiene un nivel de exigencia creciente

Porque las nuevas tasas permiten (y obligan) a que la universidad también cree mecanismos de becas y ayudas para ciertos colectivos

Porque se deben crear y potenciar los mecanismos de comunicación con y hacia los estudiantes para conocer (algo bastante difícil, indica) y atender sus peticiones e incluirlas en los circuitos presupuestarios ordinarios

Porque los ingresos de estudiantes no UE se convierten en un recurso fundamental para cada institución y para la nación puesto que aportan cuantiosos recursos y permiten el desarrollo local de ciertas actividades y además se convierten en la vía de financiación de políticas de becas a los estudiantes nacionales más desfavorecidos.

En la sesión final del Forum, se destacan varias cuestiones:

–          el aspecto financiero es fundamental pero ha estado ausente hasta ahora en los debates del EEES; convendría institucionalizar un cauce de debate e información en esta materia en el futuro

–          la crisis actual es algo más que una crisis temporal y, aunque la situación es muy diversa en Europa, es previsible que haya cambios en profundidad en las universidades, pero desconocemos su dirección y existe una gran incertidumbre respecto al futuro

–          aunque se mantiene en todas partes el discurso oficial de ampliar el acceso a la universidad y potenciar la sociedad del conocimiento, se vienen observando en los últimos meses en muchos paises decisiones e incluso decalraciones públicas que estan en contradicción flagrante con estos objetivos

–          es posible que se haya alcanzado en varios países el “máximo” del sistema universitario, principalmente por motivos demográficos y financieros

–          existe una oferta interdependencia de las vías de financiación de las universidades; las modificaciones de ciertos parámetros afecta a otros (por ejemplo desequilibrios ligados a las políticas de movilidad)

–          el sistema universitario europeo tiene elementos distintivos que le dan gran fortaleza; presenta ventajas comparativas incluso en el difícil contexto actual

–          la educación universitaria está cada vez más regulada, el peso de la exigencia burocratica de las administraciones de control llega a ser muy oneroso yesto pese a que la cuantía de los fondos públicos disminuye

–          el precio de los estudios y el importe de las matriculas es una cuestión muy controvertida y el debate público sobre esta cuestión no suele ser serio y en profundidad

En este contexto, se sugiere que las universidades asuman un papel proactivo alejándose del esquema de “quéjate y/o cumple”, que se esfuercen por desarrollar la capacidad de diversificar sus ingresos y por atraer buenos estudiantes y buenos profesionales, que mejoren el control interno y la rendición de cuentas, que decidan y planifiquen a largo plazo, que contemplen compartir ciertos medios y que mejoren radicalmente su comunicación interna y externa.

La EUA ha señalado que publicará en su web los documentos de este Forum y que más adelante editará un libro que recoja todo lo tratado en él.

Xavier Puente– 13 de junio de 2012